Pretendo con este trabajo presentar la vida de nuestro Padre Fundador San Antonio M. Zaccaria, junto con el lema de la actual campaña de fraternidad 2020 y hacer conocida la importancia de nuestro Santo.
Destacando en el presente escrito sus pensamientos que mucho dicen a nuestra actualidad.
1.1 La Campaña de fraternidad.
Sabemos que la Campaña de Fraternidad es algo que la Iglesia promueve anualmente, durante el tiempo de cuaresma para concientizar todo cristiano con el fin que dirija su mirada critica hacia algún determinado tema, donde su objetivo general es el despertar, es decir, abrir los ojos ante los problemas que están afectando la sociedad brasileña y el mundo entero. Busca entonces soluciones para las discusiones propuestas, por medio de debates, conversaciones, luchas y oración.
El tema de la Campaña de Fraternidad (CF) del año 2020 es “FRATERNIDAD Y VIDA: DON Y COMPROMISO” con el siguiente lema: “LO VIO, SINTIÓ COMPASIÓN Y CUIDÓ DE ÉL”. Es un tema que nos llama bastante la atención para con el cuidado con el otro. Somos todos llamados a reflexionar sobre el sentido mas profundo de la vida, en cualquiera de sus dimensiones, sea personal, social, comunitaria y ecológica. todas estas dimensiones abarcan el concepto de “relación”, diálogo. La vida del ser humano esta compuesta fundamentalmente de relaciones; estamos siempre relacionados con algo o alguien. Estamos en relación con nosotros mismos a lo largo de nuestra existencia, con la naturaleza, con el planeta, animales, etc. Es decir, necesariamente somos seres de relaciones.
El tema de la CF 2020 me dio la posibilidad de establecer distintas vinculaciones, sea con la misma vida de Cristo, sea con las enseñanzas del Evangelio, como con los antiguos temas ya pensados y tratados en las diversas CFs., como también con la vida de San Antonio María Zaccaria, un santo poco conocido, pero importante para la Iglesia y principalmente para nuestra familia religiosa (Orden de los Clérigos Regulares de San Pablo, Barnabitas).
Recordemos, por ejemplo, en el año 1966, cuando el lema fue “Fraternidad, somos responsables unos por otros”. El año siguiente 1967: “Corresponsabilidad, somos todos iguales, somos todos hermanos”. Hasta mas o menos el año 1979, los temas propuestos se referían a los problemas relacionados con el Pueblo, con la realidades sociales, políticas y también ecológicas. Después, de mas de 40 años vuelve a ser trabajo para la CF un tema dirigido sobre los mismos problemas, ¿por qué será? lo que esta aconteciendo con el mundo? ¿con la Iglesia? con el Pueblo de Dios? ¿Con el clero? Los problemas regresan por que nosotros como sociedad, pueblo de Dios, no estamos escuchando la voz de Dios que se manifiesta a través de la Iglesia y de nuestros Pastores.
Dios habla y nosotros no queremos escucharlo, muchas veces oímos, es decir, solo superficialmente. Debemos tener esa relación intrínseca y sincera con la Santa Madre Iglesia y con nuestros Pastores. Tenemos que saber “ESCUCHAR LA VOZ DE DIOS” Dios habla y se manifiesta. ¿Tu ya escuchaste la voz de Dios? ¿Crees en la voz de Cristo? Dios habla en las personas, en la creación, en los desastres, en las tristezas y en las alegrías. ¡Dios habla! también por medio tuyo, por medio de nuestras actitudes, si, ¡Dios habla! ¿Entonces, será que no nos escucha? o nosotros no escuchamos su voz que nos grita? Muchas veces el grito de Dios se manifiesta en el silencio, en el dolor y en el sufrimiento de nuestros hermanos y nosotros no queremos entender.
¿Se detuvo a pensar eso? La CF es algo fuerte y serio, donde tenemos que hacer el esfuerzo de reflexionar, no solamente en el tiempo de Cuaresma, sino a lo largo de todo el camino cristiano, en nuestra peregrinación por este mundo, en nuestra misión soñada por Dios, donde realizamos en cada paso que damos, como nos enseña SAMZ (2010) somos seres dirigidos hacia Dios, tenemos que ir en busca de la perfección (propio Dios) peldaño por peldaño, no podemos ir del primero al tercero, pues vamos a sentir que nos falta el segundo; nuestras piernas son cortas, para decir que en nuestra vida todo tiene un tiempo, un momento, nuestra vida debe ser vivida en modo gradual. (continua)